Nuestra misión es crear la Europa del Ahorro: permitir que los inversores europeos inviertan directamente en empresas europeas. En este tutorial, te presentamos las reglas de inversión dependiendo del país de origen y del tamaño de los proyectos.
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Para evitar que los particulares inviertan cantidades que puedan poner en peligro su situación económica en caso de pérdida de capital, la ley establece límites de inversión que deben aplicar las plataformas de crowdlending.

Los inversores particulares pueden prestar hasta 2.000 euros por proyecto (se trata de un límite francés impuesto por el regulador local para empujar a los particulares a diversificar su cartera de préstamos).

Estos proyectos suelen financiarse rápidamente, ya que el importe disponible para los inversores particulares es muy limitado, pues el fondo de October cubre el 51% del proyecto. Para que pueda participar en ellos el máximo número de inversores y fomentar la diversificación, aplicamos un límite de inversión de 100 euros en los proyectos de menos de 100.000 euros. Para los préstamos superiores a 100.000 euros, el límite es de 2.000 euros.

Este límite no repercute en la distribución entre inversores institucionales e inversores particulares. Los inversores institucionales seguirán siendo el 51%. La idea no es aumentar esta cuota, sino incrementar el número de inversores privados.

Basados en la residencia fiscal

Algunos proyectos pueden no estar abiertos a algunos inversores por motivos regulatorios.

Se aplican restricciones cuando ofrecer un proyecto a algunos países crearía complicaciones administrativas para los inversores o para October: es el caso de los proyectos italianos, que actualmente sólo están abiertos a inversores con residencia fiscal en Italia.

Proyectos alemanes

Por razones regulatorias no podemos abrir los proyectos alemanes a los particulares y las personas con residencia fiscal en Alemania no pueden invertir en October. Esto se debe a que la BaFin (Autoridad Federal de Supervisión Financiera de Alemania) exige el uso de un banco de fachada para permitir la inversión particular en empresas. Hemos estudiado esta posibilidad, que ha sido elegida por otras plataformas, pero las limitaciones adicionales y los costes hacen de ella una alternativa inaceptable en nuestro modelo de negocio. Los proyectos alemanes sólo serán financiados por nuestros inversores institucionales (ni los inversores particulares españoles, italianos, franceses o neerlandeses podrán invertir en proyectos alemanes).

Continuaremos trabajando arduamente, con nuestros compañeros de la Red Europea de Crowdfunding, para permitir que los inversores alemanes participen en la plataforma en un futuro. ¿Cómo? Confiamos en que la regulación, en particular a nivel europeo, evolucionará para permitir apoyar el crecimiento de las empresas europeas.